Ruinas del Ágora Ateniense (tomado de Ecured) |
Por Eduardo
Claro que tengo que proponer. Soy un defensor de nuestro sistema
democrático, que es perfectible, pero que con sus elevadas cuotas de democracia
participativa es mucho más justo que todos los demás sistemas políticos que
conozco. En esencia cuando los yumas se llenan la boca para decir la palabra
democracia asumen que es su concepto de democracia el que vale para el resto
del mundo. Salvando las distancias temporales y geográficas es como aquella
democracia griega, la cual se toma como el ideal de esa forma de gobierno en el
que supuestamente el pueblo, dirigido por sus Arcontes, expresaba sus
inquietudes en el Ágora y se aprobaban decisiones de gobierno con la decisión
popular. Lo que pasa es que en aquella época el “pueblo” no incluía a las
mujeres, ni a los plebeyos, y mucho menos a los esclavos.
La democracia en el capitalismo tiene que ver mucho con la definición de
democracia que redactara el gran escritor uruguayo – cubano, Premio Nacional de
Literatura de la República de Cuba, y que expresa:
“Democracia: institución
milenaria, esclavista o capitalista, que permite chupar sangre y riquezas a la
luz pública y con total impunidad.”