viernes, 12 de febrero de 2016

El patriotismo entraña muchas restricciones (De una canción del Dúo Buena Fe).

La antigua Escuela Vocacional "Carlos Marx", hoy IPVC
 Por Eduardo

Orlando:
Ayer leí un artículo muy interesante donde el autor se regodeaba sobre un sinsentido. Como es posible que en el sistema capitalista se defienda por muchas personas la propiedad privada y sin embargo en el capitalismo la verdadera propiedad, la de las grandes empresas, la de las grandes transnacionales, los grandes medios de comunicación, los grandes condominios, rascacielos, etc., se concentra en apenas el 1% de la población. El famoso sueño americano, alimentado desde que William Randolph Hearst mandó a sus reporteros a tirar para sus redacciones cuantas mentiras se les ocurrieran durante la guerra cubano hispano norteamericana, por los medios masivos de desinformación como decía el Che, va haciendo su labor de zapa sobre la conciencia de los pueblos. Las elecciones parlamentarias en Venezuela son un ejemplo de ello.
Es simpático encontrarse a veces a compañeros de estudio que se fueron de Cuba, y verlos convertidos en un ejemplo de revolucionario en versión miamense. De hecho la mayoría de mis condiscípulos de la antigua Escuela Vocacional “Carlos Marx” viven la mayoría de las veces mejor que lo que hubiesen vivido en Cuba, pero cuando ponen un pie en la isla, es como si les pusieran un electrodo y comienzan a evocar “The Way we were” en aquella Cuba con bistec de carne res con papitas que costaban 1.60 CUP, los muñequitos de “Tío Stiopa”, “Mashenka y el Oso” “El malvado Abdajá” y el resto de la caterva de muñequitos rusos, las carreras por orientación de la SEPMI, y los viajes al Parque Lenin, que debe ser el único sitio público con el nombre de Vladimir Ilich que quede en el mundo.