viernes, 5 de mayo de 2017

Yo no cambio a Cuba por nada.

Valle de Viñales en Pinar del Río, extremo occidental de Cuba.
Por Eduardo

Anónimo:
¿Tú sabes cuál es la diferencia entre tú y yo? Que yo no cambio a Cuba, y a mi gente por un filete de carne de res. Ni por un auto, ni por una laptop, ni por un DVD, ni por un celular, ni por un penthouse, ni por una piscina en el jardín. Lo que tú llamas baba son principios que tú no posees, y que los aprendí de mis mayores, y de mis líderes entre ellos Fidel y Raúl. Son los ideales por los que miles de cubanos han dejado su sangre sobre esta tierra y en países hermanos, y la seguiremos dejando.
Lo que pasa es que ustedes renuncian a todo lo que significa Patria, porque donde tienen corazón tienen estómago, y donde deberían tener cerebro llevan una caja registradora. A lo mejor tú no sabes lo que es vivir en un solar, ya que hablan tantos de ellos. Yo nací en uno. Y ya ningún miembro de mi familia vive en mi barrio. Mi madre tenía 4 hermanos, y todos hoy viven en casas fabricadas por ellos gracias a su trabajo y dedicación. A un tío mío recientemente fallecido el estado le entregó un apartamento con todo adentro en un edificio de 14 plantas. Y cuando fui machetero, porque yo sí he hecho de todo en este país, a muchos compañeros les entregaron casa prefabricadas, autos y motocicletas, y los precios de esas entregas eran subsidiados. El auto Moskvich de mi padre costó 4005.00 pesos cubanos nuevecito de paquete.