viernes, 19 de mayo de 2017

Yo nada tengo, si no tengo Patria.

Tarja que conmemora el inicio del incendio de Bayamo.
Foto tomada del Blog El Diwan
 Por Eduardo

Anónimo:
La historia de muchos de los revolucionarios cubanos por tradición es la de un grupo de hombres ricos de cuna que lo abandonaron todo para irse a luchar por la libertad, como Céspedes, Aguilera, Agramonte, Maceo Osorio, Eduardo Machado, Moralitos, y otros dueños, de haciendas y vidas que por libertar a la Patria lo dieron todo, hasta su propia vida, y afrontaron la misma vida de sacrificio, que aquellos que los siguieron, persiguiendo el sueño de una Patria Libre.
Cuentan que cuando le preguntaron un grupo de patriotas a Francisco Vicente Aguilera durante el incendio de Bayamo: - Don Pancho ¿Quemamos su casa también?; el Primer Vicepresidente de la República de Cuba en Armas expresó; - Claro, yo nada tengo,  si no tengo Patria.
Fidel y Raúl son de esa estirpe de hombres, hubieran podido, desde su posición de hombres adinerados, haber hecho con sus vidas lo que quisieran. Prefirieron, entregarlas a la causa de los humildes y los desposeídos, seguir los caminos inciertos y plagados de sacrificios de la Revolución Social.