viernes, 22 de septiembre de 2017

La verdad de la historia de Cuba no admite tergiversaciones.

La lucha contra el bandidismo se extendió desde el
mismo 1959 hasta 1965. (Foto Cubadebate)
 Por Eduardo

Orlando:
Estoy viendo la serie “LCB, la otra Guerra” todos los sábados. Inclusive mi hijo que como casi todos los de su generación casi no ve televisión no se la pierde. Cuando salió el primer capítulo el Nuevo Herald sacó un artículo desvalorizando la veracidad del producto audiovisual, que si el asesinato de Conrado Benítez representado no había sido así, que si patatín, que si patatán, que si los comunistas estaban transmitiendo la serie porque ya dentro de un mes se terminaba el socialismo en Cuba, en fin, que los bandidos como Pichi Catalá, asesino de los niños Fermín y Yolanda, o Maro Borges, Emilio Carretero o el mismísimo Osvaldo Ramírez fuesen angelitos con alitas de plumas, aureola y caritas sonrosadas.
En fin que no quieren del lado allá del charco que recordemos la historia tal y como fue. De acuerdo a los creadores de la obra, y aunque está catalogada de ficción se preocuparon porque todos los sucesos que aparecieran en la misma estuviesen debidamente registrados y documentados. Los cambios son muy pocos; al Caballo de Mayaguara en la serie se le denomina el Gallo de Cumanayagua, a Osvaldo Ramírez el Comandante Orlando, etc.